Dogmas fracasados, intereses de clase y desastre económico
El gobierno cubano, dada la pérdida sistemática de su credibilidad ante la sociedad, necesita mostrar que «hace algo». Pero lo que hace, lo hace mal. No es topando precios como se combate la inflación, sino creando las condiciones adecuadas para que aumente la producción, y ello no se logra con consignas políticas.
La inestabilidad cambiaria y el funcionamiento de los mercados en Cuba
Para que la economía supere la crisis se necesitan profundos cambios institucionales y políticos que permitan remover el actual inmovilismo paralizante, que únicamente ha conseguido profundizar el subdesarrollo a partir de una cada vez mayor dependencia externa.
¿Qué nos dice la situación migratoria cubana?
Sí es necesario clarificar el precepto de Patria, llevándolo al hogar de todos los cubanos; pero también es imprescindible que se siente a la mesa de cada compatriota una prosperidad tangible según la fórmula martiana: con todos y para el bien de todos.
Entre calumnias y realidades de la economía cubana
Los dirigentes cubanos se han negado a asumir su responsabilidad por el fracaso de la Tarea Ordenamiento que, tras una década de «estudio», diseñaron y aplicaron mal y fue establecida en el peor momento posible.